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La llegada de Nia a ‘Tu Cara Me Suena’ sacude el ‘blackfacing’ del programa, ¿qué piensan hacer?

La llegada de Nia a ‘Tu Cara Me Suena’ sacude el ‘blackfacing’ del programa, ¿qué piensan hacer?

Atención, porque ‘Tu Cara Me Suena’ tiene una polémica tarea entre manos de cara a su siguiente edición. La lleva arrastrando unas cuantas temporadas, pero en esta ya no puede escapar de ella porque acaban de confirmar a Nia, ganadora del último ‘OT’, como nueva concursante del show. Hablamos, como ya indica el titular, de la polémica del blackface.

El blackface, por si andáis un poco perdidos, es la costumbre de maquillar a gente blanca de negra, algo que molesta a la comunidad negra porque, con todo el sentido del mundo, su identidad no es un disfraz que el resto nos podamos quitar y poner. En Estados Unidos, además, tiene una raíz bastante chunga, porque a finales del siglo XIX, cuando esta costumbre se implantó más a lo grande en el mundo del espectáculo, los blancos pintados dibujaban a los negros como gente feliz y divertida, cuando la realidad es que la esclavitud los condenaba a una vida de sinsabores y desprecios. En 1960 quedó oficialmente prohibido su uso en el país, y ahora es tremendamente mal visto.

Pero en España, faltos de tanto background, seguimos tirando de él: hasta hace bien poco en las cabalgatas de Reyes Magos, por ejemplo -donde ya parece haberse erradicado casi del todo- y en televisión, en platós como el de ‘Tu Cara Me Suena’. La historia es que hay quien dice que no es un blackface al uso, porque el famoso de turno no interpreta a una persona negra per se, sino a tal o cual artista, del que intentan copiarse todos los rasgos. Pero la cuestión es: ¿de ir alguien negro como invitado, se le pintaría de blanco semanalmente para hacer de determinados perfiles?

Mucha gente lo duda, y el programa lo tiene que confirmar ahora. La llegada de Nia plantea tres escenarios posibles con esta práctica de ‘Tu Cara Me Suena’:

 

01 > Deciden dejar de hacer blackface a todos los concursantes

Lo más sensato sería tomar la decisión de dejar de hacer blackface. De hecho, en ‘Your Face Sounds Familiar’ es exactamente lo que se hace. Se copian rasgos, vestimenta, etc., pero no se juega con el tema racial. El blanco queda blanco y el negro queda negro. ‘Tu Cara Me Suena’ podría aprovechar la jugada para aprender del error de temporadas anteriores e incluso tratar de explicar la polémica.

Al hilo de esto, programas como ‘RuPaul’s Drag Race’ han sido claro ejemplo de aprendizaje con las emisiones: el concurso cambió ha ido cambiando su léxico con el paso de los años, pasando del «que gane la mejor mujer» a «que gane la mejor drag queen», o del «caballeros» a «racers», para incluir a mujeres en el concurso. Esta concienciación se ha ganado los aplausos del público, que ha reconocido la intención de avance del programa.

La cuestión es, ¿tendrá ‘Tu Cara Me Suena’ la misma valentía?

 

02 > Deciden no blanquearle la cara a ella, pero mantienen el blackface del resto

Si deciden mantener el blackface del resto de concursantes, la idea de no blanquearla a ella podría también estar sobre la mesa. Es decir, elegirían personajes negros para Nia, lo que cerraría algo su abanico pero le evitaría tener que pasar por el betún de color beige.

Claro que tiene sus desventajas: Nia sólo podría hacer personajes negros, porque de hacer uno blanco sin maquillarse como tal, todo sería bastante extraño, porque el programa estaría cambiando una práctica con una concursante, sin asumir el error de llevarla a cabo en el resto.

Ergo en este caso, la polémica sólo la esquivarían sin presentarle el reto de imitar a Katy Perry, Lorde o El Sueño De Morfeo, por poner algunos ejemplos. Si la viéramos imitando a Ana Mena sin maquillar de blanca y en la misma gala Agoney hiciera de Usher cargado de betún, ¿no sería bastante extraño y notorio?

 

03 > Deciden blanquearle la cara también a ella

Por tanto, la tercera alternativa sería caer también en el whitefacing (¿se diría así?) de Nia. Es decir, que la cantante también se maquillara la piel cuando le tocara hacer de blanca. Pero a todas luces, a todos nos suena un poco raro que lo haga, ¿verdad? Podría ocurrir, pero no tiene demasiada pinta.

Y es precisamente ahí donde caemos en que el blackface no está bien. Si, por ejemplo, un grupo de escolares interpretara a una tribu africana en una fiesta, pocos se escandalizarían por pintarles de negro. Pero ¿de haber un alumno negro, si hicieran de esquimales, iría él pintado de blanco? Chirría lo suyo. Y todos sabemos que no lo haría.

 

Por tanto, el caso de Nia debería servirle a Atresmedia para dar un paso al frente y aprovechar para educar en la inclusión y la comprensión de por qué están mal ciertas prácticas que tenemos asumidas como correctas. De lo contrario, al esquivar el bulto estarían ignorando una polémica que es cuestión de tiempo que les estalle en la cara. Y sería una lástima desperdiciar el momentum.

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