Louisa, ganadora del ‘The X Factor’ de 2015, se ha presentado con una reinvención de sí misma, bastante más rebelde y ‘malota’ que la que conocimos cuando en sus dos primeros singles aún llevaba su apellido junto al nombre. ‘Yes’ es un auténtico bop que entremezcla el ‘Dirrty’ de Christina Aguilera con el ‘When I Grow Up’ de las Pussycat Dolls y lo trae a 2018 con la voz de una muchacha rubia, estupenda y con ganas de comerse el mundo.
Lamentablemente, todavía con menos ganas de comerse el mundo que la propia canción: es decir, ‘Yes’ es tan loca, que a Louisa aún se la ve contenida en el vídeo oficial del tema, que estrenó a través de The Fader antes de colgar en los canales de distribución habituales. La británica monta un fiestón en casa, se sube a las mesas, lleva ropa que roza los obsceno y se muerde el labio mientras entona el tema, y sí, da el pego, pero se nota demasiado impostado. A diferencia de cuando Britney se soltó la melena en ‘I’m A Slave 4U’, Christina en ‘Dirrty’ o más recientemente Miley Cyrus en ‘We Can’t Stop’, a Louisa aún le queda grande lo de ir de chunga sexy.
Puede que necesite algo más de entrenamiento con un par de singles bop extra, o puede que, sin más, se esté asomando a un abismo un poco obligada por el fallo de su personalidad más de chica del portal de al lado. Al fin y al cabo, están siguiendo la táctica Fifth Harmony con ella: venderse al marketing de la erótica. Está por ver si Louisa consigue hacer de ‘Yes’ un ‘Work From Home’ o corre de nuevo en busca de unos pantalones.
De momento, el vídeo oficial no ha ayudado demasiado a la canción, que sí, retiene su top40 en el iTunes británico, pero no se asoma al top200 en Spotify. Al menos un millón ya han conectado con ella en la plataforma, pero salvo milagros, el banger que es su nuevo single terminará quedando tan deslavado con lo sexy de su vídeo.
