Jess Glynne está de gira por estadios del Reino Unido como telonero del comeback de Spice Girls, que hace un par de días consiguió reunir a entre 75.000 y 82.000 fans -según diversas fuente- en Dublín. Y claro, la popularidad de la cantante permite que se pueda marcar un setlist de 10 canciones antes de que el cuarteto de clásicos como ‘Space Invaders’ salga al escenario.
Es decir, diez versiones de ‘Hold My Hand’ con diferente letra, así que imaginad a los millares de personas que están esperando ahí para una versión tango de ‘Viva Forever’ o una subida de BPM para ‘Too Much’ escuchando semejantes cortes idénticos mientras ella bala y agita su melena rojiza, más bien poco, dicho sea de paso.
Así que arranquemos con la buena noticia del universo Glynne: la cantante se ha quedado muda después del concierto de Dublín, y está en reposo vocal. De modo que ha tenido que cancelar su paso por el BBC Radio1 Big Weekend apenas horas antes de que se la esperara en el escenario. La cantante, recordémoslo, ha sido operada dos veces en las cuerdas vocales por problemas con las mismas, con lo que si sigue forzándolas, posiblemente acabe cantando siempre como Madonna en Eurovisión. O como Madonna en general.
Bien, vamos ahora con la mala noticia, que es que, a pesar de todo esto, seguiremos escuchando a Jess Glynne porque tiene un nuevo single con Jax Jones, llamado ‘One Touch’, que ha sido lanzado este viernes y que, por ahora no ha causado excesivo impacto entre el público del Reino Unido, pero no descartemos que las semanas venideras le den impulso: ‘You Don’t Know Me’ tardó mes y medio en alcanzar el top10, ‘Instruction’ dos meses en llegar al top20, ‘Breathe’ otros dos para su #7, y ‘Play’ otro tanto para su #8.
Así que UK dirá.
