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‘Señorita’: ¿bop del verano o hit impulsado por un montaje pop?

‘Señorita’: ¿bop del verano o hit impulsado por un montaje pop?

Shawn Mendes y Camila Cabello acaban de firmar uno de los hits del verano, ‘Señorita’. Bueno, dos de los hits del verano, porque además del del apartado musical, la pareja tiene otro en la prensa amarillista, con su supuesta relación sentimental. Un hit que está alimentándose poco a poco, y que además de a los rumores y cuasi confirmación de su relación, ha dado también alas al tema. Y a ninguno de los dos le hacían daño los titulares.

Tanto es así que nos preguntamos: ¿cuánto del éxito de la canción se debe al propio tema y cuánto de ello al revuelo que las fotos de la pareja han causado? Vamos por puntos.

 

La canción es un bop y se ha lanzado en un momento apropiado

Indiscutiblemente, ‘Señorita’ tenía visos de funcionar a poco que la entonara alguien con un perfil medianamente popular. El tema es una composición de Ali Tamposi (‘Havana’, ‘Youngblood’, ‘Stronger (What Doesn’t Kill you)’ en colaboración con ambos y otra media docena de autores, y está producida por Benny Blanco y Cashmere Cat. En otras palabras: tenía que ser un hit. De no serlo, sería un absoluto desastre, porque en ese tándem se nota inversión.

‘Señorita’ se publicaba, además, en pleno verano, el momento más apropiado para que un tema de corte sutilmente latino, de sabor a atardecer playero, se colara en los playlists de los oyentes y en las ondas de radio. Esta misma canción, en octubre, también podía haber funcionado pero su appeal sería bastante menor.

 

Ambos venían de un momento bajo a pesar de su status

Camila Cabello y Shawn Mendes son dos de las mayores estrellas del pop actual. Sería absurdo pensar que ninguno de ellos pasa por un momento de fracaso: él acumula certificados y álbumes de éxito y ella, además de un debut con un par de hits, se ha consolidado como estrella del pop con sus performances y campañas. Pero, si comparamos el impacto de ‘Señorita’ al de anteriores singles de los dos, está claro que algo ha hecho ‘click’ con el dúo porque ninguno venía de marcarse grandes éxitos.

Shawn venía de conseguir un #11 bastante estable con ‘In My Blood’, pero el resto de singles de su último trabajo se quedaban fuera del top20 de Billboard y tampoco generaban un gran impacto internacional. Sólo ‘Youth’, que se lanzaba en plena ‘fiebre’ por Khalid, era certificado Oro en algunos mercados. Su anterior single, ‘If I Can’t Have You’, llegó al #2 pero sufrió lo suyo como single demasiado front-loaded: dos meses después, sufría en la lista americana hasta la publicación del dueto.

Camila Cabello consiguió un enorme éxito con ‘Havana’, pero sus lanzamientos posteriores no igualaron su éxito: ‘Never Be The Same’ aprovechó el arrastre, pero ninguno de los demás singles disfrutó de un éxito celebrable. Ni sus colaboraciones con Bazzi, Mark Ronson o Major Lazer o Pharrell han sido hits contundentes, y no ha sido hasta la llegada de ‘Señorita’ que el regreso de Camila Cabello a lo alto de las listas ha sido un hecho.

 

¿Cuánto de influencia tiene realmente la prensa?

Visto lo visto, cuánto de impacto ha tenido su relación. Su equipo publicitario tiene bastante claro que la relación funciona. Y se nota en la forma de explotarla: al principio conocimos el vídeo del dúo, que era la segunda colaboración de la pareja pero se presentaba con un tono bastante más subidito que la primera de hace un lustro; después aparecieron unas fotografías de Mendes y Cabello dados de la mano, sugiriendo que la pareja era un hecho; y unos días después, los chicos aparecían besándose en un local, en unas fotografías que no parecían demasiado casuales.

Una puesta en escena clarísimamente preparada, sin disimulo ni intención de aparentar un robado, porque el objetivo no era que pareciera natural, sino el dar que hablar: Cabello y Mendes provocaban titulares en toda la prensa internacional, los focos volvían a su persona y vivían su mayor momento mediático en meses. Por supuesto, en mitad de la promoción de ‘Señorita’, que se acercaba al #1 británico hasta conseguirlo y al top5 americano en el que aún se mantiene.

 

Visto lo visto, ¿es la canción un hit por sí mismo o es un hit a golpe de marketing? Pues un porcentaje de cada, porque de haber sido la relación de los chicos algo anecdótico que acompañara la canción, se hubiera producido todo en medio de una naturalidad mucho mayor. De momento, el shippeo Shawnmila o Camiawn -ridículas ambas opciones- se queda en un miniteatro con una buena banda sonora que lo acompaña.

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