Nil Moliner es como ese amigo que todo el mundo tiene, que es todo risas y buen rollo, y que un día te lleva a bailar en mitad de una de esas fuentes que salen directamente del suelo, otro día te compra un algodón de azúcar y corréis juntos por un parque de atracciones y al tercero está tocando la guitarra en mitad de una plaza mientras tú piensas: «lo mismo ya se ha pasado». Pero incluso a esos amigos les da un día la bajona, y el día que les da, les da. A Nil acaba de darle con el lanzamiento de ‘Mejor Así’, su nuevo single. Una canción que habla de dos personas que se quieren mucho pero deben decirse adiós porque así es mejor.
Entonces Nil Moliner crece en intensidad en una canción que se aleja de sus habituales ritmo buenrollistas y happy pop-rock, de los que te alegran la mañana en la radio y te ponen a dar saltitos en la oficina a la mínima que te quedas solo, y propone una canción de las de quedarte sentado en el sofá, mirando al infinito, con un café entre manos que hace ya rato que se te quedo frío. Y lo único que se te ocurre pensar cuando la canción termina y te descubres en la situación es «si fuera más guapa, o un poco más lista, si fuera especial, si fuera de revista…». Pero no lo eres. Y si fueras de revista, créenos que serías de ‘Jara & Sedal’. Y entonces te da mayor bajón.
Lo único que a uno le anima es pensar que Nil Moliner también lo pasa mal, pero lo pasa mal con gorrito. Permanece ahí. Es una señal de que volverán los tiempos del algodón de azúcar. El gorrito es un síntoma de «eh, déjame mi tiempo para estas movidas tristes repletas de un incomprensible autotune», que cuando yo termine da cantar me pongo otras siete pulseras y nos vamos al rastro, como pretendíamos.
Nil Moliner compite por el Premio Odeón a Artista Revelación -como en los últimos 22 años, es la eterna revelación- y sale de gira, si nada lo impide, a partir del mes de marzo y hasta diciembre.
