Niall Horan se convertía en el tercer One Direction en lanzar un álbum en solitario el pasado viernes, cuando ‘Flicker’ veía la luz, apoyado por el éxito de sus dos primeros singles, ‘This Town’ y ‘Slow Hands’, y el colchón más leve que le facilitaba la balada cuqui ‘Too Much To Ask’.
Para dar un poco de empuje al proyecto, Niall ha tenido dos estrategias. La primera, la de montarse un miniconcierto para Jimmy Kimmel, al aire libre y con una contundente cantidad de público, matando además dos pajaros de un tiro: también deja ver lo que su primera gira en solitario puede ofrecer. La segunda, ha sido ofrecer ‘Flicker’ en el ya clásico ticket-bundle, una estrategia seguida por likes como Kesha, Pink o Katy Perry, que «regala» el disco con la compra de una entrada para los conciertos, una medida cada vez más habitual que seguirá computando para Billboard como la descarga normal del disco.
En cualquier caso, agridulces noticias para ‘Flicker’, pero que no se nos revolucionen los fans, que no hablaremos de ningún dato catastrofista: Niall tiene aseguradísimo el #1 en Billboard la semana que viene, y el disco será el tercer lanzamiento de un One Direction en conseguirlo -tras los liderazgos de ‘Mind Of Mind’ de Zayn y el debut de Harry Styles-, pero las cifras no serán tan contundentes.
Si Zayn abría su andadura con 157m unidades de lista y Harry Styles lo hacía con 230m, ‘Flicker’ aterrizará en el #1 de Estados Unidos con unas 145m unidades. Unas cifras bastante saludables en cualquier caso, que además, sí superarían las ventas puras de Zayn: mientras ‘Mind Of Mine’ arrancó con 112m copias vendidas, se espera que Horan sea capaz de vender 126m.
Veremos si sus últimas apariciones públicas aumentan los datos del álbum y finalmente consigue superar las marcan de Zayn o si, efectivamente, Niall Horan queda como el tercero en la fila. Eso sí, lo hará con notable dignidad de ventas.
https://youtu.be/gvRVg1bBl6Y
https://youtu.be/1QXIGe8JObU
