Como sabéis, Malú está viviendo una EMEIELDICIÓN últimamente, y todo lo que hace le sale mal. Se ha quedado sin apoyo en los medios de comunicación, debe estar rayadísima de cómo la gente trata su relación de pareja, y para colmo de males, se rompió una pierna y canceló media gira. Ojalá fuéramos todas tan cojas y sobre todo tan delgadas como ella.
Pero dentro de todo este drama, provocado por una mano negra oculta tras un zapato pelín grande y una rampa oblicua, Malú ha hallado apoyos que todavía pueden mantenerla en pie y animarla cuando está hecha polvo. En los recientes Premios Cadena Dial -que no le importan a nadie, porque por no tener, no tienen ni categorías-, Laura Pausini ha respondido a las preguntas sobre la relación que une a Malú y el líder de Ciudadanos, Albert Rivera:
«Bien, bien por ella. ¿Qué les interesa a todos ustedes si está enamorada? ¡La chica quiere follar, ya está bien! ¡Brava Malú, así se hace en la vida, que perdemos tiempo!»
Y así, Laura demuestra que no es un ángel, no se cayó del cielo, ni es gente que busca el amor verdadero. Ella aplaude a Malú por echar unos polvos con el político, sin mayores ataduras. Claro que, probablemente, Laura lo hace porque no tiene ni idea de lo que le están hablando ni de quién es ese tal Albert el que le preguntan.
Poco después, al preguntarle por si le gustaba el político de raya en el pelo -y lo que no es el pelo, como por ejemplo, la camisa-, Laura se marcaba con él un «I don’t know her» de manual. A Laura la sacas de su zona de confort de gente conocida, y ya la mareas: ella conoce a los coaches de su edición de ‘La Voz’, a los Glitch Gyals, a Marco por mucho que se marchara para no volver, y a James Blunt, en paz descanse, aunque a veces le confunde con James Morrison, dando lugar a situaciones bastante incómodas en los backstages en los que coinciden, y él piensa que ella será Nelly Furtado.
vedlo no tiene desperdicio pic.twitter.com/zs4wByEaO2
— riri 🦖 (@aliwcasper) 15 de marzo de 2019
