Dicen que lo último que ser pierde en la vida es un imperdible. Que mis cojones treinta y tres, porque un imperdible te despistas un segundo, y salvo que lo tuvieras destrozando tu ropa a golpe de agujero, en nada está perdido entre las baldosas. «Imperdible» igual debería ser el nombre de, yo qué se, un crédito hipotecario, los empastes, Leiva… no sé, cosas que siempre están presentes lo quieras o no. Pero ya os decimos que un imperdible se pierde fácilmente.
¿De qué iba todo esto?
Ah sí, Kylie Minogue. Kylie lo que no pierde es el interés por promocionar su música en Estados Unidos, aunque la última vez que le hicieran caso allí fue cuando gritaron su nombre en la fila de un Palazzo. Luego resultó que el helado de mantecado era para Kylie Jenner, y no veas el chasco. El suyo de maracuyá todavía no lo habían preparado.
Pero Kylie insiste, y ha acudido al show de Jimmy Fallon a presentar el último de sus singles, ‘Say Something’, ahora que la fecha de lanzamiento de ‘Disco’ va a acercándose. El álbum verá la luz el 6 de noviembre, suponemos que ya otro single mediante, pero hay que seguir abriendo boca al fanbase para que las cosas vayan igual de bien que en la era ‘Golden’.
Sólo que Kylie se ha llevado la estética disco hasta el plató de Fallon, y todo lo recargado del vídeo para ‘Say Something’ no ha presentado también en el directo. Que sí, que en 1970 se utilizaba el chroma y aquello no funcionaba igual de bien que ahora, pero chica, sinceramente tampoco veíamos a Raffaella con medio cuerpo desaparecido en el fondo de cortinillas de estrella. Un pelín exagerada la presentación. Que hay momentos en los que prácticamente hay un micro de pie y una melena rubia flotando en un chroma. Que uno no sabe si está viendo a Sia.
Pero es Kylie, y como bien se dijo en Twitter hace unos días, si a una persona le cae mal Kylie, probablemente es una mala persona. Lo dice la ciencia, no nosotros.
https://youtu.be/zWVi2P53nj0
