La hermana pequeña de Britney Spears y popular protagonista de la serie ‘Zoey 101’, Jamie Lynn Spears, ha roto su silencio sobre el tema de la tutela legal. Lo ha hecho no porque haya considerado que era el momento adecuado tras hablar su hermana, sino tras verse presionada desde varios flancos: por un lado, la mocatriz tuvo que suspender la posibilidad de comentar en sus fotos de Instagram después de que con el testimonio de Britney se ganara un buen puñado de críticas, y por otro, los rumores de que Netflix está planteándose despedirla de la serie en la que trabaja, ‘Sweet Magnolias’.
Según algunos medios de comunicación americanos, los aún presuntos abusos familiares que los Spears han ejercido sobre Britney están poniendo en jaque la relación de Jamie Lynn con la compañía de streaming. Sea como fuere, la hermanísima ha abierto por fin la boca.
Lo ha hecho en redes sociales, con un speech bastante pobre y malo, en el que alega que «la situación es ajena a ella» y que «no le importa si su hermana viaja al quinto coño o tiene trillones de hijos». Hija, no te hubiera costado nada preparar un speech más digno.
Esto es todo lo que ha comentado:
«Quiero tomarme un momento para aclarar algo. El único motivo de que no lo haya hecho antes es que creo que mi hermana es capaz de hablar por sí misma y decir lo que crea que tiene que decir en público. No era mi sitio, no era lo correcto a hacer. Pero ahora que ha hablado tan claro, creo que puedo seguir su camino y decir lo que creo que tengo que decir.
Creo que es bastante obvio que desde el día que nací sólo he amado, adorado y apoyado a mi hermana. Es mi hermana mayor, por delante de toda esta mierda. No me importa si quiere viajar a un bosque perdido y tener trillones de hijos en mitad de la nada. O si quiere volver y dominar el mundo igual que lo ha hecho un montón de veces antes, porque yo no tengo nada que peder con ninguna de las dos opciones.
Esta situación no va conmigo de ninguna de las maneras, porque yo solamente soy una hermana preocupada por su felicidad. Hice una elección absolutamente consciente de únicamente participar en su vida a modo de hermana.
Quizá no apoyé a mi hermana de la forma que el público quería, con un hashtag en una plataforma pública, pero os aseguro que he apoyado a mi hermana desde bastante antes de que hubiera un hashtag y lo haré también después de él.
Trabajo desde los nueve años, llevo cuentas desde los diez. No es que deba nada al público, porque mi hermana sabe que la amo y la apoyo. Ella es la única persona a la que debo algo. Conozco a mi familia. Yo soy yo. Yo hablo por mí misma.
Estoy orgullosa de ella por utilizar su voz, por pedir una nueva vista -tal y como le dije que debía hacer muchos años atrás-, no en una plataforma pública, sino en una conversación entre dos hermanas. Así que estoy muy orgullosa de que haya dado ese paso. Si la tutela termina mañana o lo que sea que ella necesite hacer para ser feliz, lo apoyo. Al 100%.»
Como decíamos, una elección de palabras bastante pobre, en la que además hace feos al hashtag público #FreeBritney. También es gracioso que diga que su hermana podía hablar libremente, cuando es precisamente algo que Britney Spears ha explicado que no podía hacer. O que a ella la situación ni le va, ni le viene, cuando su hermana se ha encargado de un puñado de pagos de su carrera en los últimos años.
Britney Spears habló claramente de «toda» su familia durante su testimonio hacia el juez. No excluyó de esa lista a su hermana. Con lo que esta pantomima en redes sociales, esas que dice que no utiliza para apoyar a su hermana porque lo hace de forma privada pero sí utiliza cuando necesita salir del paso de sus acusaciones, no creemos que le haya servido de mucho.
Jamie Lynn Spears addresses Britney’s conservatorship testimony in newly shared Instagram stories:
“I think it’s extremely clear since the day I was born I’ve only loved, adored, and supported my sister… I have nothing to gain or lose… This situation does not affect me” pic.twitter.com/Symqw4zPYw
— Pop Crave (@PopCrave) June 28, 2021
