Disney prepara el desembarco de uno de sus titanes para finales de año: la segunda parte de ‘Frozen’ ya está aquí y tenemos un tráiler que confirme que, efectivamente, la película inicial tendrá continuación. Y la elección de «desembarco» no es casual, porque, tras la publicación del tráiler de la secuela, nos preguntamos: ¿dónde va Elsa en mitad del mar, tratando de superponerse a las olas frente a ella? Y lo más inquietante aún, ¿cómo consigue que su pelo no se encrespe con semejante cantidad de salitre y humedad a su alrededor? ¿Cómo es capaz de hacerse tan rápido una coleta sin que se le enrede un algae en el pelo?
Está claro que Elsa ha pensado más en champús hidratantes que en una solución lógica para sus problemas, porque, muchacha, pudiendo construir un palacio de hielo entero, que no haya pensado en un macro puente por encima del agua tiene su aquel. ¿Por qué intenta cruzarla congelándola? Quizá lo descubramos cuando la película se estrene, según previsiones, el próximo mes de noviembre, pero aún hay más preguntas que nos deja el tráiler.
¿Las chicas acaban de descubrir el otoño y por eso flipan con las hojas marrones de los árboles? ¿O nos hemos perdido algún detalle? ¿El cambio climático ha provocado que en Arendelle sólo tengan verano e invierno? ¿Somos los únicos que sabemos que la espada que Anna saca al final de la película apunta a Olaf, único ausente del tráiler*? ¿Es la muchacha que sale hacia la segunda mitad del tráiler el tan cacareado interés amoroso de Elsa? ¿Está Disney realmente dispuesta a arriesgar mostrando un tonteo entre los personajes?
Lo más importante del tráiler, sin embargo, es que por fin vemos a princesas llevando un outfit en condiciones para una aventura de acción: pantalones. Ambas llevan pantalones, aunque eso sí, decorado con bien de brillantina, velos salientes de las mangas y decorado de forma regia. Que siguen siendo parte de la realeza, oiga.
*Pues sí que aparece sí, call us Serafín Zubiri.
