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Bellepop vuelve a reunirse: «Grabamos el disco en 5 días, nos despertaban de madrugada… fue muy complicado»

Bellepop vuelve a reunirse: «Grabamos el disco en 5 días, nos despertaban de madrugada… fue muy complicado»

Ayer se reunían las ‘Popstars’ para un decepcionante nuevo cover de su ‘Todo Por Un Sueño’ y nos quedábamos con ganas de un poco de salseo, de que nos contaran algo de su experiencia en el concurso, algo del detrás de las cámaras, etc. Gracias a Dios, nuestros amigos de FórmulaTV han encontrado un momento entre foto irreconocible de no se qué actor infantil de 1993 y desnudo de cuello para arriba de no se qué actriz de ‘Los Serrano’ para hacer una entrevista a las cinco Bellepop -gracias por no invitar a gente como Neusi o Emma, porque es que who cares- y abrir un poco el cajón de la mierda que viene y yo me voy.

Para empezar, han aclarado por qué seis de ellas, incluyendo cuatro «populares» finalistas, no han participado en el comeback en vídeo:

«(Davinia) Unas no han querido participar y otras no han podido. A Montse, por ejemplo, la pillamos embarazada, que se iba al hospital pensando que ya le tocaba parir y al final no, pero que casi iba a dar a luz. Nos hemos juntado todas las que hemos querido y podido, y que de 30 seamos 24 nos parece un montón. (…) Tenemos un grupo de WhatsApp de Bellepop desde hace muchísimos años, y ahora otro con todas que se llama El Reencuentro.» 

También han hablado de los mecanismos televisivos del programa. Recordemos que ‘Popstars’ era tan fantasía, que el programa fue un poco improvisando según el concurso avanzaba: el taller de música era un lugar bastante cutrecito donde las chicas ensayaban, las tenían alojadas en un hotel y después las encerraron en chalecito con barbacoa:

«(Marta) A mí no se me olvidará el día en el que nos reunieron a todas en el hotel y nos dijeron: «¿aquí qué pasa, que no lloráis?»

«(Norma) Una vez me pasó que acabé llorando en un cuarto de baño y entró una de las jefas, no recuerdo cuál, diciendo «¿tú qué haces aquí? Tú eso me lo tienes que contar», y me llevaron a las cámaras, pero claro, ahí ya me corté. Empecé a entender cómo funcionaba el tema de la televisión, que tiene su parte… yo entiendo que la gente quería saber, conocernos más, entonces por ese lado entiendo que quieran que eso salga.»

Otro de los momentos álgidos de la entrevista es cuando las chicas hablan de aquella gala en la que les cambiaron el estilismo. Para que nos pongamos en situación, la gala consistía en darles a las chicas un look más de ‘Popstar’. En realidad salieron todas echas un cristo.

«(Eli) A mí me pusieron de morena, con un melenón, cuando a mí el pelo oscuro me sienta fatal. Salí allí que era más mata de pelo que persona.»

«(Davinia) A mí me cortaron el pelo para después ponerme extensiones. Fue un disparate. Lo que pasa que estás ahí y te dejas hacer, porque a ver…

«(Marta) Porque no tienes más huevos.»

«(Eli) Además, mientras nos hacían el cambio de look no teníamos espejos, no sabíamos lo que nos estaban haciendo.»

«(Marta) Es que ese cambio de look no lo hizo el equipo de maquillaje y peluquería de Telecinco. Lo hicieron dos personas que no voy a decir qué equipo fue. Ni el maquillaje de la gala fue al que estábamos acostumbradas, además se nos nota en la cara.»

Después de la victoria del quinteto en ‘Popstars’, que dejaría a Nora y Mara con la miel en los labios, las chicas grabaron ‘Chicas Al Poder’. Un álbum que bueno… era lo que era. Algún bop, muchísima canción de catálogo y una impresión de prisa que no fue sólo una impresión:

«(Eli) Fueron cinco días: nos encerraron en la casa del productor y tuvimos que grabar el disco en cinco días. Así que, claro, nos despertaban de madrugada… y necesitas tener la voz reposada un mínimo. Era muy complicado»

«(Davinia) Recuerdo una vez que me levantaron así de madrugada y tenía que hacer una voz muy aguda. Me encerraron en la cabina, me pusieron velitas y de todo para intentar que la voz saliera, pero lógicamente yo lo que necesitaba era dormir. Era un ritmo para lanzar el disco súper rápido, para que la gente no se enfriara.»

«(Norma) Nos levantábamos prontísimo, ibas allí, ponías la voz, no te daba tiempo a poner ningún sentimiento a lo que estabas cantando. Además de que las canciones no las habíamos elegido nosotras, ni nos habían preguntado si nos gustaban siquiera.»

Y claro, las cosas así, la dinámica del segundo disco -que nunca llegó a grabarse ni lanzarse-, pintaba igual. Y las chicas decidieron no tomar parte de la historia.

«(Marta) El segundo disco que nos propusieron iba de la misma manera que el primero: con temas ya escogidos por ellos, sin pedirnos opinión a nosotras. El primer disco, para cuando salimos del programa, ya estaba todo hecho, fue simplemente meter las voces y no tuvimos ni voz ni voto. Pero después de un año trabajando, pues queríamos cantar algo que nos identificara. Fue la misma jugarreta de la primera vez: querían grabar el disco en Barcelona en cinco días, en medio de la promo y de algunos conciertos que teníamos. Y nos negamos a hacerlo de esa manera. Nos pusieron la maqueta y dijimos: es que esto no lo vamos a defender.

«(Eli) La letra del single era como «hola somos chicas, llevamos tatuajes, llevamos piercings» y era como, mira no. En el segundo disco queríamos participar un poquito más. 

«(Norma) Éramos jóvenes, tampoco queríamos imponer nada, simplemente queríamos un trabajo más colaborativo, proponer cómo vestirnos… no era un «o se hace como nosotras decimos o nada», era estar más en conexión con nuestra esencia. Pienso que el error fue de la discográfica, porque podíamos haber conseguido algo súper bonito.»

«(Eli) Era que o pasábamos por el aro o nos íbamos a la calle. Yo me sentí un poco juguete roto en ese momento.»

El problema no era únicamente la desconexión con el proyecto y la falta de implicación en un segundo álbum, es que las chicas tampoco estaban viendo demasiado dinero de todo aquello.

«(Marta) Claro, nosotras veníamos de diferentes puntos de España y de pronto nos vimos viviendo en Madrid. ¿Y de qué vivíamos en Madrid? Nos habíamos hecho todos los programas del mundo, pero ¿de qué vivíamos? La historia es que teníamos cerrados conciertos con Los40 todos los días de agosto, pero por otro lado un booking de un montón de conciertos nuestros. La discográfica se negó a que pudiéramos trabajar, porque teníamos que grabar el disco en cinco días.»

«(Eli) Nos tuvieron todo el verano liadas con la Zona40 y Cadena Dial, que no veíamos un duro de aquello, porque era promo, y luego nuestros conciertos propios como la gira de Bellepop se negaron a que hiciéramos muchos, que era lo que nos aportaba dinero a nosotras.»

«(Norma) Es que si nosotras nos poníamos a hacer conciertos, que eso lo gestionaba un manager, no teníamos tiempo para hacer las promociones, que es lo que ellos querían porque es lo que vende discos y es lo que hacía ganar dinero a la discográfica. Entonces era incompatible.»

«(Davinia) Y por otro lado estaba la radio, que también presionaba: si no hacíamos su promoción, tampoco nos ponían en la radio, nos iban a vetar… ahí detrás hay muchos intereses. Había mucha presión por todos los lados.»

Con la negativa a grabar el segundo trabajo, las chicas fueron despedidas y aguantaron poco juntas. Eli se marchó del grupo, ya sin sello, para formar parte de una temporada de UPA Dance que no recuerda con tanta alegría, porque nunca tuvo con ellos la misma conexión que con ellas. Aquel segundo disco de UPA tampoco fue bien y tanto la serie como la banda fueron canceladas.

Las chicas han ido buscándose la vida: Norma tiene una escuela, Carmen Miriam trabaja en seguridad, Davinia en Correos, Eli está en paro pero ha sido dependienta y también ejerce de influencer, y luego está Marta, que es el típico perfil de eterna B-Lister que opina que el pop le debe el favor de permitirle ser una estrella.

El final de la entrevista es algo más triste, con todas las chicas asumiendo que echan en falta el mundo de la música. Davinia, especialmente, cuenta cómo ocurrió su despego con la industria.

«(Davinia) Tuve un problema en la garganta y me dijeron que o me operaba o me quedaba callada. Y me callé durante 15 años. Era tal cosa lo que me había pasado por dentro, que algo dentro de mí se rompió, del sentimiento hacia todo lo que hay detrás de la música… ni cantaba en la ducha. Hasta ese punto, no cantaba ni en la ducha. Ahora, con todo esto, después de verlas a ellas, con todo el tema de las fotos y después de esta historia, estoy un poco más animaba. Espero que me sirva personalmente para cantar un poco más, aunque sea a mis niños.»

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